ENTIERROS ARMONICOS

Queridos seguidores de este blog, he sentido una gran satisfacción porque me han hecho llegar un relato tan conmovedor, que hubiera llorado si no fuera porque tengo un lagrimal tapado y el otro ojo es de vidrio.

Por favor escuchen con cuidado:

" Hola soy Silvina del barrio de Parque Chas-Co.  Vivo sola, digo sin pareja, sola no estoy porque mi edificio tiene seguridad.

Perdón sigo, yo leí en el maravilloso blog Todavía Suelta como conocer a tu pareja. ¡¡¡¡¡¡Gracias por existir  Blog!!!!!!.  Por eso me animé a contarles mi experiencia,  yo no se, quiero compartirla y a la vez no, disculpen mi contra-dicción pero estoy un poco nerviosa es la primera vez que escribo y de otras cosas ni siquiera puedo decir la primera. 

Bueno como les decía, me armé de coraje y fui a uno de esos lugares a conocer gente, quise ir con mi mamá pero me dijo que ya era hora que me independizara: -nena a los 58 ya podes despegarte de mi.

Me vestí y me dirigí a la casa de Velatorios "Entierros Armónicos".

Estaba lleno de gente, todos con buena onda, claro estaban festejando el acogimiento del difunto en el otro mundo y el recogimiento de los vivos en este.  La verdad que en materia de entierros hay de muchos tipos, usos y costumbres y hasta algunos de tipo agropecuario como enterrar la batata entre otros tubérculos conocidos.

El lugar era exquisitamente romántico, lleno de velas y velones, todos blancos haciendo juego con el color de la cara del que ya no estaba más con nosotros, bah con ellos porque, yo ni lo conocía.

En medio de esa luz tenue y difusa, no solo abarataban el consumo de luz sino propiciaban los vínculos que, sumado particularmente al esmerado clima enviciado por el olor a flores, al muerto y a los tufos particulares, el encuentro con otro ser humano era un hecho y no en el balde, sino en general en el baño.  No sabes bien como te vin-culas con el otro, pero no importa porque como bien dijera el especialista en relaciones humanas Sakura Supito "todo agujero es poncho" . 

Cuando vi al señor que se acercó a mi me pregunté " ¿yo puedo estar abajo de eso?" Nooooo!!!!!! pero igual me dije aplicá la ley Tabohada tapale la cara con la almohada y listo. Igual no pasó nada porque el señor estaba en uno de esos días...¿eso no nos pasaba a nosotras?....

Igual la pasé bomba, no conocí a nadie, pero en realidad yo creo que no quería conocer a nadie porque y si lo conozco y me gusta, no puedo quejarme que estoy sola y si no sufro como disfruto.  Así que me fui pero dejé mi mail para que me avisen cuando se realiza el próximo encuentro.

Es que cuando una es soliaria de nacimiento termina siendo solterona con argumento."

Silvina tu historia es un ejemplo de muerte, digo de vida.  Gracias por permitir que este blog publique tu nota.  Anímense como Silvina y escriban, déjense transitar por el placer del desencuentro que tanto nos interesa encontrar.

Raque